lunes, 16 de mayo de 2011

Crónicas fantasmas a la luz de una vela- 3° entrega. Lazos rotos



Lazos rotos

La pasada semana hubo en San Julián un nuevo intento de suicidio por parte de una joven persona. Este intento fue frustrado por dos jovencitos que auxiliaron a esta persona, y la polémica surgió por la "supuesta tardanza" de la ambulancia, tardanza que fue desmentida por el médico que estaba a cargo de la guardia,la polémica fue suscitada porque el hospital había estado en conflicto sindical hacía poco tiempo, en conjunto con el gremio docente. El tema de los suicidios de los jóvenes santacruceños hunde en la frustración y en la impotencia a una parte de la comunidad y a quién escribe estas líneas semana tras semana; este nuevo intento y lo traumático que fue su tratamiento ponen nuevamente sobre el tapete estos temas, que son sociales y como son sociales nos involucran a todos...más allá de que hasta en lo discursivo se suele sacar el cuerpo a determinados temas, generalizando : "los argentinos son esto" "los sanjulianenses son esto otro". Pero de lo que realmente se trata es de que nos sintamos parte, para poder resolverlo. Quiero unir este tema con otro hecho de violencia, que sucedió en la histórica escuela cuatro, más precisamente a la salida del establecimiento, a unas tres cuadras. Mas allá de los detalles por todos conocidos, que no vienen al caso, vale la reflexión que escuché de la señora directora, vale por valiente, y porque alguna vez se debe hacer algo por cambiar esas actitudes. De un tiempo a esta parte los valores que nos cohesionan como grupo se están rompiendo en mil pedazos. El descreimiento institucional se ha trasladado a los individuos que componen las instituciones; se desprestigian las instituciones y se pierde el respeto por quienes la integran. Es social, y como es social está en nuestras manos cambiarlo. Los padres insultan a los docentes de sus hijos, los descalifican, los desafían (esto más o menos todos lo hemos visto) y de esa forma "enseñan" a sus hijos a actuar del mismo modo. Se fomentan valores que no son positivos, todos sabemos que la mayoría de los médicos no son oriundos de santa cruz, por la simple razón que una localidad que no llega a los diez mil habitantes no puede cubrir las especialidades médicas con los NYCs, ¿eso es culpa de los médicos que vienen de otros lados del país? ¿ese hecho hace que no tengan que tener reclamos sindicales? ¿por el simple hecho de venir de otro lado se convierten en "muertos de hambre"o "incapaces que encima se animan a protestar y hacer huelga"? ¿será que tienen que pedir permiso para eso?Una de las justificaciones para los insultos se hace desde que algunos de los que critican la medida sindical de los maestros ganan menos que ellos, pero la idea no es que nos comparemos entre nosotros quien gana más y quien gana menos, el asunto pasa por otro lado, por cuánto es necesario ganar para vivir en la actualidad. El mismo caso, más o menos, se da con los docentes, con el agravante que hasta el gobernador alimenta esas teorías, mezquina y torpemente, intentando enfrentar a los ciudadanos contra los ciudadanos. Esto es el síntoma de la ruptura de los lazos interpersonales, que nunca pueden dar buenos resultados, pero los dobles discursos abundan, son reproducidos sin pudor por los medios, no son puestos en cuestión tampoco; no nos podemos engañar ni escandalizar cuando los niños, los jóvenes actúan como espejos de lo que nosotros promovemos por acción u omisión. Después claro, rasgarse las vestiduras y poner el problema fuera es una actitud que TODOS podemos tomar, hablamos en 3° persona y nos ponemos fuera del problema. Quién no ha escuchado a un padre, a partir de un hecho de violencia en la escuela decir "yo le digo a mi hijo que se defienda" (leamos devolver golpe con golpe) nada de diálogo, ni negociación. Leía en uno de los diarios de la zona que un "padre" justificaba la agresión a los docentes diciendo que ellos estaban "provocando". En este estado de cosas, "provocar" es pensar diferente del otro y justifica la agresión. Así no hay cuerpo que resista, ni cuerpo social, ni cuerpo físico...el doctor Sebastián Corro, del área de salud mental mencionaba que el intento de suicidio es el cuerpo que abandona la lucha, el cuerpo que no puede más, el cuerpo tomado como algo integral, es un cuerpo y alma rota (que luego costará mucho mucho reparar). Lo mismo pasa con el cuerpo social con la ruptura de los vínculos. El discurso avala las prácticas, las palabras nunca son inocentes...y quienes las emitimos tampoco. Señor Gobernador, señores políticos,dignifiquen su tarea y cuiden sus palabras, porque serán responsables por las prácticas que de ellas devengan.

Claudia Elisabet Sastre- 16 de mayo de 2011

1 comentario:

  1. Es lamentable que siga pasando esto y lo peor es que nos acostumbremos a ello. Creo tambien que la ignorancia engendra violencia y descalificaicion hacia el otro.
    Ceci

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