Vamos a jugar a algo. Como en Hallowen (esa fiesta gringa que reeemplazó a nuestras festividades autóctonas) cuando los chicos disfrazados tocan a tu puerta y preguntan: dulce o truco?. Basta caminar las calles de nuestro pueblo para ver que el refrán "hecha la ley, hecha la trampa" se ha hecho carne, por desgracia. La mentada picardía criolla, o la letra muerta de la ley nos lleva por delante.
Escena 1: subo a un remis (luego de pedirlo desde la puerta porque con solo abrir una pared espesa de humo rancio me ataca), subo al vehículo e inmediatamente tengo que bajar la ventanilla. El olor a cigarrillo está impregnado en todos lados. El conductor me preguntá, irónico: -"tiene calor señora?"; - no,le respondo, soy alérgica y no puedo respirar humo de cigarrillo, tenía entendido que había una ordenanza municipal que prohibía fumar en lugares públicos y medios de transporte-
-"Ahhh, me responde enojado, cuando todo el mundo cumpla la ley, yo la cumplo"-
Me banco el mal humor del remisero, que, entre otras reglas incumplidas, decide no cumplir una más, porque total, no pasa nada...y tiene razón. No pasa nada.
Escena 2:entro con mi hijo a un comercio, que ostentaba en su puerta de entrada el cartel de la ordenanza que prohibe fumar. La comerciante que me atendió estaba fumando...enfrente está la municipalidad, con su cohorte de inspectores que saben que "Hecha la ley, hecha la trampa". O el soborno, o el "qué me importa".
Y ¿cuál es la justificación?. Si todo el mundo lo hace; está prohibido manejar alcoholizado, pero todo el mundo lo hace; venderle alcohol a menores, tener a los perros sueltos y defecando en la calle, etc, pero Todo el mundo lo hace. Matar también está prohibido, y usted lo hace?. Ya se, va a decir que soy extremista, pero a cumplir las leyes y a respetarlas es algo que se enseña. Bueno, no se está enseñando eso. Y así es como nuestros gobernantes, con la complicidad de la mayoría silenciosa que elige, no sólo vivir al filo de la ley, sino también faltarle el respeto a los demás, con toda impunidad, eligen vivir al filo, o directamente fuera de la ley. Y no vaya usted a pedirle cuentas (las cuentas que al fin y al cabo, usted paga con sus impuestos, a diario) porque se escudan en que no tienen tiempo de dar explicaciones. Bah, no me venga usted con esas minucias de dar explicaciones. Funcionarios públicos, su función, la que tan honrosamente dicen ejercer, debe ser PÚBLICA. Público viene del pueblo, del soberano, hay que hay que educar. Para que cumplir la ley no sea una carga, sino lo más natural del mundo. Y no es pedir restricciones a las libertades civiles,sino todo lo contrario. Es respeto. Los funcionarios públicos deben cumplir y hacer cumplir las leyes, que deben ser para el bien común, y sus actos deberían ser públicos (y publicados) de la manera más natural del mundo. Yo no quiero una sociedad de tramposos. No quiero tener que decirle a mis hijos que las ordenanzas son letra muerta, ni las leyes, no quiero que la trampa sea la ley. No es razón que "todo el mundo lo haga". Todo el mundo lo hacía, hasta que se sancionan las leyes, las normas, las ordenanzas, luego de la sanción, si usted lo sigue haciendo, es un ilegal. Sépalo. No se qué eligirá usted, pero yo no me callaré más la boca. Exigiré que mis derechos sean cumplidos, se enoje quien se enoje.
